La creación del margarita se suele atribuir a hábiles tácticas de marketing llevadas a cabo por personas del sector, especialmente productores de tequila, alrededor de la década de los 40.

Lo cierto es que nunca sabremos dónde se originó realmente. La procedencia de esta bebida nunca se podrá verificar de verdad, pero es posible que fuera un producto de las regiones fronterizas de EE. UU. y México entre los años 30 y principios de los 50.  

Si bien circulan muchas historias sobre los orígenes de nuestra bebida cítrica de agave, hemos escogido personalmente nuestras favoritas para que puedas compartirlas con tus clientes la próxima vez que les sirvas alguna copa con bordes salados. 

La mayoría de las historias de cócteles que afirman arrojar luz sobre su origen tienen como protagonista a un dedicado bartender que creó una bebida muy personalizada para una persona quisquillosa o alérgica a lo que estaba en la carta. 

Una de las historias cuenta que el bartender Danny Negrete creó la bebida como un regalo de boda en 1936. Danny y su hermano, David, abrieron un bar en el hotel Garci Crispo en Puebla, México, y la receta (que incluía triple seco, zumo de lima fresca y tequila blanco sobre hielo picado) se concibió para la que pronto se convertiría en su cuñada, Margarita. 

Otra historia contada a menudo es la que trata de Margaret Sames, una socialité de Dallas que asegura haber inventado el clásico en una de las fiestas en su casa de Acapulco en 1948. Aparentemente, la lista de invitados estaba llena de gente influyente de la hostelería y la restauración que rápidamente presentaron el cóctel a la sociedad en general . 

Sin embargo, lo que es más probable, según el historiador experto en coctelería David Wondrich, es que la bebida fuera una evolución de los ultrapopulares cócteles Daisy (una familia de cócteles consistentes en un destilado base, curaçao y cítricos, como el Sidecar), que se tomaban en la década de los 30. El nombre del cóctel, margarita, es un guiño a la copa Daisy (margarita en inglés) con base de tequila que se lleva disfrutando desde hace unos 100 años. 

El modelo de margarita es un clásico por una razón. Combina alegres notas cítricas con sabores dulces de agave, acentuados por la inclusión opcional de sal... Simplemente funciona. 

Para experimentar con la receta clásica, prueba a utilizar tequilas envejecidos para añadir una complejidad adicional y notas sutiles de roble y vainilla.

Para determinar los cambios y los matices en nuestras versiones, empecemos por observar el original. 

Añadir un poco de picante puede equilibrar una bebida maravillosamente y un margarita es el ejemplo perfecto. Echa un vistazo a esta receta de Spicy Margarita  para conseguir exactamente eso. 

Sustituir el Blanco por Don Julio Reposado introducirá unas notas más suaves de vainilla y especias de las barricas a tu Margarita Reposado, alejándote de la intensa acidez del original para ofrecer un cóctel más otoñal que es igual de atrevido y suave. 

• El margarita clásico siempre ha sido, sistemáticamente, uno de los cócteles más populares del mundo. 
• El margarita suele ser un producto de la región fronteriza de EE. UU. y México.  
• Se cree que se creó entre los años 30 y principios de los años 50.